El nuevo hábitat de los lémures de cola anillada contempla un amplio espacio para
el desarrollo de actividades de los ejemplares, tiene cascada y un lago con
capacidad de 260 metros cúbicos de agua, además de espacios verdes para que
puedan juguetear y tomar el sol, que es lo que más disfrutan hacer.
Sandra Correa, gerente del Bioparque Ukumarí, indicó que este hábitat cuenta con
600 metros cuadrados, al tiempo que permitirá a los visitantes una mejor vista para
disfrutar de la naturaleza y contemplar a esta gran familia compuesta por cinco
divertidos y curiosos animales: 3 hembras y 2 machos.
Por su parte, el alcalde Carlos Maya, resaltó la importancia de abrir estos nuevos
escenarios: “Estamos inaugurando un nuevo hábitat en el Bioparque Ukumarí, un
lugar muy importante para garantizar que propios y visitantes puedan venir y
conocer esta especie, pero lo más importante de ello, garantizar la reproducción de
estas especies en el planeta”.