Francia se ha convertido en el primer país que inscribe el derecho al aborto en su constitución. Las dos cámaras del Parlamento francés han validado el texto en una sesión conjunta extraordinaria en el Palacio de Versalles.
Un total de 780 diputados han aprobado la introducción de la siguiente frase en el artículo 34 de la Carta Magna: "La ley determina las condiciones en las que se ejerce la libertad garantizada a la mujer de recurrir a la interrupción voluntaria del embarazo".
Sólo 72 diputados han votado en contra en una votación histórica que ha sido recibida con una gran ovación en el hemiciclo.
Era necesario que 555 de los parlamentarios votaran a favor de la revisión que había sido ya aprobada, por amplia mayoría, por ambas cámaras de forma separada. Por ello, ya se esperaba que el texto propuesto por el presidente de la República, Emmanuel Macron, saliera adelante.