Gabriel Vallejo Chujfi, defiende lo nuestro y a los más olvidados

El Representante a la Cámara Gabriel Vallejo Chujfi, hace el cierre de su campaña en un corregimiento del municipio de Pueblo Rico, llamado Villa Claret, a tan sólo un paso del Chocó, una comunidad totalmente apartada y olvidada por la clase política.

Desde el apartado Corregimiento de Villa Claret, Pueblo Rico, el quien para muchos es el mejor Congresista de la región, reiteró que volverá para seguir trazando una ruta en defensa de la vida, la propiedad y la libertad.

Al evocar el momento desde la llamada Risaralda profunda, insistió ante sus moradores que no " somos los políticos tradicionales que llenan plazas, sino que representa un equipo que busca defender a los más olvidados.

Los que no pueden seguir siendo buscados sólo en época electoral y por quienes no les interesa porque tampoco hay votos.

Lo importante, expresó, en el ejercicio político es servir a todo un pueblo, a los risaraldenses por la defensa de la vida, la propiedad y la libertad.

"Despido mi campaña con la bendición de Dios, con optimismo y esperanza, lo hago rindiendo cuentas de manera constante en todos los municipios con amor, pasión y convicción y diciéndoles que no los hemos olvidado".

El abogado Representante fue considerado como el mejor congresista del Risaralda, llevándolo a hacerse una pregunta:

¿Cómo no defender un territorio de grandes riquezas, una comunidad que pide ser escuchada y que sus solicitudes tan sólo son tener una mejor vivienda y un mejoramiento de vías terciarias?

Esa es la labor del Representante, gestionar por el departamento y escuchar las solicitudes de la comunidad, unas que muchos políticos no quieren oír.

 ¿Qué ha hecho Gabriel Jaime Vallejo Chujfi por Pueblo Rico?

En cuanto al factor social, Pueblo Rico el día de hoy cuenta con gas domiciliario, en donde más de 4.684 familias serán beneficiadas, un logro atribuido al Representante a la Cámara.

Asimismo, gestionó la obra del tramo entre Pueblo Rico y Santa Cecilia en la vía al Chocó. 10 kilómetros sin pavimentar, entre dos capitales de departamentos y ahora ya es una realidad, contando con una inversión de 220 mil millones de pesos, una obra que las comunidades venían reclamando hace más de 15 años.




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